El cáncer es una enfermedad caracterizada por el desarrollo de células anormales que destruyen el tejido normal del cuerpo. Con frecuencia se extiende por todo el cuerpo y es la segunda causa de muerte en el mundo. Recientemente, esta situación ha mejorado gracias a la detección precoz del cáncer y a un tratamiento adecuado. Aunque se tiene una ligera idea de cuáles son algunos factores de riesgo, la mayoría de los cánceres se dan en personas que no tienen ningún factor de riesgo conocido. Estos son: la edad, hábitos como fumar o beber, y antecedentes familiares.
Los síntomas varían en función de la parte del cuerpo afectada. Los signos más comunes son fatiga, bultos bajo la piel, cambios de peso o de piel, tos persistente, dificultad para respirar o tragar, ronquera, indigestión, dolor muscular inexplicable, fiebres o sudores nocturnos y hemorragias inexplicables. Para prevenir el cáncer, es aconsejable dejar de fumar, evitar la exposición excesiva al sol, hacer ejercicio, beber alcohol con moderación y programar exámenes de detección del cáncer.